Me pasa lo mismo que hace 5 años atrás o tal vez, 6 no me acuerdo y no quiero sacar la cuenta.
Arranco algo con alguien, pero mi cabeza esta en otra persona.
Lo veo y esta todo bien, pero cuando llego a casa no me importa, quiero a ese otro que me deja sin dormir.
Y si pudiese elegir... si ese otro estuviese para mi, como yo quiero... eso, justo eso seria la felicidad absoluta. Pero no, nunca tengo los huevos para decirle las cosas, entonces me quedo en el molde y disfruto los pocos momentos que tengo con él.
Ojala el corazón y la razón tiren para el mismo lado. Pero es ley, nunca pasa.